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Dicen los emprendedores que montar un negocio es una de las experiencias más satisfactorias de la vida. Que te llena y motiva como ningún trabajo lo ha hecho antes, que es indescriptible la sensación de sacar adelante un negocio propio. Dicen también que tu trabajo se convierte en tu vida y tu vida en tu trabajo pero que ofrece a cambio grandes satisfacciones como llegar a recoger a los niños al colegio, madrugar un poco menos (o un poco más) o hacer deporte en mitad de una larga jornada para desconectar.
Puede que sea por eso, o por otras muchas razones, por las que cada día más trabajadores por cuenta ajena se lanzan a la aventura de emprender. El sueño de todos; superar la temida barrera de los dos años, ya que según las estadísticas solo un 15% de las startups sobrevive pasado este periodo.
En la mayor parte de las ocasiones, estos fracasos se convierten en realidad en una oportunidad para empezar de nuevo, con más experiencia y evitando los errores de la primera vez. Pero, ¿no sería genial poder hacerlo bien a la primera? A continuación tomamos nota de los principales errores de los emprendedores noveles y cómo evitarlos:
1. Elegir mal a socios y equipo. Hay que elegir muy bien quiénes y cuántos socios te acompañarán en la aventura de emprender. Si son amigos y familia, lo más importante es separar muy bien la dimensión personal y familiar y estar bien preparados para cualquier posible adversidad. En ocasiones resulta complicado encontrar buenos compañeros de camino, pero para poder llegar lejos hay que ir acompañado. En este caso hay que dejarse guiar por el sexto sentido y saber calibrar quien puede ayudarnos y quién puede resultar un inconveniente.
En cuanto al equipo, hay que ser conscientes de que a la hora de poner en marcha el proyecto, tenemos que delegar en manos de expertos las diferentes partes de la empresa. No podremos abarcar todo nosotros solos. Para ello hay que saber rodearse de diferentes perfiles con conocimientos muy diferentes para poner en marcha la parte tecnológica, la económica, la comercial... Cada elemento de la empresa es importante y hay que saber delegar en personas de confianza cada una de las áreas.